Once again, we enter this very special season of Corazón por la Casa. As we look back over the past 12 months, since we sowed that miraculous offering in faith in November 2023, we have seen the hand of the Lord guiding us, providing for us, and making a way. Without any doubt, we can firmly declare: “Ebenezer, the Lord has helped us up to this point.”
Thanks to our joint generosity, we have been able to invest in premises, social projects and in the Arab world of the Mediterranean so that the work of the Lord advances strongly.
Our hands are still full; of provision, of God’s faithfulness and of testimonies of His power. Everything we have comes from Him and is His.
So, one more year, let’s sow with faith. Let us not hesitate to give because He who began the good work will be faithful until it is completed. He will continue to provide for our homes and families, so that together we can continue to build His church and proclaim His name throughout Spain.
May God fill us with courage!
Go ahead, Church.
Join us for these 21 days of devotional, and let us prepare our minds and hearts for the offering of Corazón por la Casa 2024.
OUR HOME
Every time we open the physical doors of our house to get together for meetings and hangouts, something beautiful happens. People are welcomed into a community of love and acceptance; a place of restoration where they will be led to Jesus and his message of salvation; a place where chains are broken and hearts are healed.
Throughout these last nine years, we have seen thousands of people receive Christ as Savior and plant themselves at home, but we believe that there are still millions to be reached throughout Spain. For this reason, precisely, our focus this year is to continue adapting the premises that we already have in Barcelona and for which we have already made a great sacrifice, but in which there is still much to do, such as finishing the facilities for young people and children. With this offering, we also want to continue preparing and strengthening our finances to enter new, more spacious and constant places in Madrid and Valencia. We will do this by purchasing material that we are now renting every Sunday so that we can allocate the money from that rental to savings for future premises.
Through your generosity and sacrifice, you will be able to pave the way for more people to experience what you experienced the day you raised your hand to follow Jesus and decided to plant yourself in this house. They are not just local. They are sources of light and hope for our cities.
NUESTRA COMUNIDAD – CityCare
«Perdí a mi marido en la pandemia y al quedarme sola con 3 hijos, perdí también la fe. Gracias a la ayuda de CityCare, no solo recibí alimentos, sino que recuperé la esperanza y la fuerza para seguir adelante».
Ayudar a crear familias saludables y comunidades inclusivas es nuestro objetivo. Estamos comprometidos a llevar esperanza y apoyo a través de acompañamiento, cuidado y amor, aportando soluciones a problemas reales. Desde CityCare, no solamente repartimos toneladas de alimentos, sino que estamos ahí en los momentos más difíciles, en las temporadas más complicadas de las personas, para hacer juntos el camino hacia una vida más plena. Nuestros programas de ayuda social están enfocados en la restauración de una vida digna.
Como casa, no nos conformamos con lo que ya hemos logrado. Queremos seguir buscando nuevas oportunidades de llegar a más personas para restaurarlas en el nombre de Jesús. Con tu ayuda y generosidad, lo haremos posible.
NUESTRO MUNDO
‘Corazón por la Casa’ nunca se ha tratado solamente de nuestra casa local, sino de Su casa global, la Iglesia de Jesús. Este año, nuestro corazón está lleno de expectativa porque vamos a apoyar a un país que por geografía e historia está ligado a nosotros.
Por primera vez, nuestra generosidad conjunta va a pisar una tierra preciosa, pero en la que se persigue a nuestros hermanos y hermanas en la fe: Marruecos – المغرب. Después de años de hablar de nuestro amor por el Mediterráneo, creemos que ha llegado el momento de poner acción a esas palabras. Hemos estado en contacto con iglesias locales y pastores en Marruecos, en las que, por cierto, Dios está haciendo cosas preciosas a pesar de la persecución al evangelio, y hemos descubierto diferentes necesidades que podemos suplir a corto plazo, como puede ser el envío de material para seguir extendiendo la palabra de Dios en dárija (dialecto árabe de Marruecos) y muchas otras necesidades a largo plazo que van surgiendo conforme nos adentramos en esta tierra, como, por ejemplo, invertir en la formación de líderes patrocinando sus estudios en otros países de lengua árabes en los que hay más libertad religiosa.
Solo el Cielo sabe lo que se esconde al otro lado de este paso de fe pero, sin duda, Dios está haciendo algo nuevo y veremos ríos de vida fluir en lugares que han estado desolados y desérticos durante generaciones.