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Día 3 - Dios siembra propósito en nosotros

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“Ciertamente David, después de servir a su propia generación conforme al propósito de Dios, murió, fue sepultado con sus antepasados, y su cuerpo sufrió la corrupción”.

Hechos 13:36 NVI

“El Señor cumplirá en mí su propósito. Tu gran amor, Señor, perdura para siempre; ¡no abandones la obra de tus manos!”

Salmo 138:8 NVI

“Mis trajines y descansos los conoces; todos mis caminos te son familiares”.

Salmo 139:3 NVI

La palabra “propósito” es una palabra que está en el centro de atención en muchos contextos de la sociedad. Hoy en día hablamos de propósito en los negocios, de propósito en nuestras relaciones, de propósito en nuestra vida.

Cuando la sociedad habla de propósito, siempre se centra en el individuo. En cambio, cuando la Biblia habla de propósito, trae la perspectiva del diseño y el plan de Dios para lo que está haciendo en nosotros para impactar el mundo que nos rodea.

David sirvió al propósito de Dios para su generación, también declaró en el Salmo 138 que el propósito de Dios se cumpliría. Nuestro propósito se encuentra en el plan que Dios tiene para el tiempo en que vivimos.

¿Te has detenido a pensar que cuando Dios te tejió en el vientre de tu madre sembró un diseño y un propósito que solo tú puedes cumplir en lo que él está haciendo en este tiempo y en esta generación?

Eres único en esta generación porque no hay nadie más con lo que Dios ha sembrado en ti para cumplir su propósito. Dios nunca dejará de comprometerse con el diseño y el propósito que ha sembrado en nosotros. Él es fiel, permanece para siempre y nunca abandona la obra de sus manos.

Oración: Padre, gracias por sembrar en mí algo único para esta generación. Abre mis ojos para que pueda ver lo que estás haciendo a mi alrededor y para que pueda ser parte de ello. Ayúdame a cumplir tu propósito para mí en este tiempo.