Hace 10 años desde un pequeño café de un centro comercial en Barcelona, levantamos una oración desafiante de la realidad, una invitación al Espíritu Santo a hacer lo que solamente el podía hacer. Miramos a nuestra tierra y nos atrevimos a hablar lo que no era como si ya fuese. Con valentía proclamamos que nuestro país sería tierra de aviamiento, que multitudes de jóvenes y generaciones vendrían a la CASA de Dios para encontrar salvación y restauración, que la iglesia sería una fuente de creatividad y comunidad para nuestras ciudades y que otras naciones del Mediterráneo vendrían a contemplar la obra de Dios y serían inspirados para verlo en su propia tierra. 10 años después, esa oración es nuestra realidad semanal. Por la gracia de Dios juntos hemos construido una iglesia vibrante, fuerte, sana y creciente, imperfecta, por supuesto, pero con un espíritu enseñable y completamente dependiente de la gracia de CRISTO en sus debilidades.
La pregunta es ¿Y ahora qué? Tras 10 años de edificar la iglesia estamos más convencidos que nunca que esto no ha sido más que el principio, que todavía estamos por experimentar nuestros mejores días como comunidad y que un gran avivamiento esta desatándose sobre España y tenemos el privilegio y la responsabilidad de ser parte de éste. Es tiempo de volver a soñar, de volver a pronunciar oraciones VALIENTES y desafiantes, de volver a llamar a las cosas que todavía no son, como si ya fueran en el nombre de JESÚS, es tiempo de extender nuestras cuerdas y reforzar las estacas porque Dios esta a punto de traer una nueva ola de crecimiento y expansión a nuestra iglesia.
Y por eso precisamente existe Corazón por la CASA. Mediante nuestra ofrenda y generosidad conjunta vamos a poder dar forma a nuestra fe, y ver el REINO de los cielos avanzar en nuestra propia iglesia local, en nuestras ciudades y sus realidades de necesidad y, como ya empezamos a ver el año pasado, en Marruecos y la iglesia perseguida del Mediterráneo.
Juntos podremos levantar una ofrenda tan grande que tendrá un impacto duradero y tangible en la visión de Hillsong España.
A continuación te dejamos las diferentes causas que estaremos apoyando y creyendo por ellas con nuestra ofrenda conjunta. Te animamos a poner en oración la cantidad que vas a traer y a dejar espacio para que Dios pueda hacer un milagro en esa cantidad también.
GRACIAS iglesia por vuestra constante fidelidad a la CAUSA de CRISTO y por vuestro amor por su iglesia.
Firmes y adelante.
Con amor,
Juan & Damsy
Pastores Hillsong España
Descárgate la aplicación “Hillsong Give”, selecciona tu campus y la opción de “Corazón por la Casa”
Usa nuestro sobre especial de
Corazón por la Casa
Realiza un ingreso en la cuenta
IBAN ES68 0049 3073 02 2914176068
PROYECTOS
NUESTRA CASA
Cada vez que abrimos las puertas físicas de nuestra casa para juntarnos en reuniones y quedadas, algo precioso sucede. Las personas son bienvenidas a una comunidad de amor y aceptación; un lugar de restauración en el que serán conducidas hacia Jesús y su mensaje de salvación; un lugar en el que las cadenas se rompen y los corazones son sanados.
A lo largo de estos últimos nueve años, hemos visto a miles de personas recibir a Cristo como Salvador y plantándose en casa, pero creemos que todavía hay millones por ser alcanzadas en toda España. Por eso precisamente, nuestro enfoque de este año es seguir adecuando el local que ya tenemos en Barcelona y para el que ya hemos hecho un gran sacrificio, pero en el que todavía queda mucho por hacer, como por ejemplo, acabar las instalaciones para jóvenes y niños. Con esta ofrenda, queremos asimismo seguir preparando y fortaleciendo nuestras finanzas para entrar a nuevos lugares más espaciosos y constantes en Madrid y Valencia. Esto lo haremos comprando material que ahora estamos alquilando cada domingo para poder destinar el dinero de ese alquiler a ahorros para futuros locales.
A través de tu generosidad y sacrificio, podrás allanar el camino para que más personas experimenten lo que tú experimentaste el día que levantaste tu mano para seguir a Jesús y decidiste plantarte en esta casa. No son solo locales. Son fuentes de luz y esperanza para nuestras ciudades.
NUESTRA COMUNIDAD – CityCare
«Perdí a mi marido en la pandemia y al quedarme sola con 3 hijos, perdí también la fe. Gracias a la ayuda de CityCare, no solo recibí alimentos, sino que recuperé la esperanza y la fuerza para seguir adelante».
Ayudar a crear familias saludables y comunidades inclusivas es nuestro objetivo. Estamos comprometidos a llevar esperanza y apoyo a través de acompañamiento, cuidado y amor, aportando soluciones a problemas reales. Desde CityCare, no solamente repartimos toneladas de alimentos, sino que estamos ahí en los momentos más difíciles, en las temporadas más complicadas de las personas, para hacer juntos el camino hacia una vida más plena. Nuestros programas de ayuda social están enfocados en la restauración de una vida digna.
Como casa, no nos conformamos con lo que ya hemos logrado. Queremos seguir buscando nuevas oportunidades de llegar a más personas para restaurarlas en el nombre de Jesús. Con tu ayuda y generosidad, lo haremos posible.
NUESTRO MUNDO
‘Corazón por la Casa’ nunca se ha tratado solamente de nuestra casa local, sino de Su casa global, la Iglesia de Jesús. Este año, nuestro corazón está lleno de expectativa porque vamos a apoyar a un país que por geografía e historia está ligado a nosotros.
Por primera vez, nuestra generosidad conjunta va a pisar una tierra preciosa, pero en la que se persigue a nuestros hermanos y hermanas en la fe: Marruecos – المغرب. Después de años de hablar de nuestro amor por el Mediterráneo, creemos que ha llegado el momento de poner acción a esas palabras. Hemos estado en contacto con iglesias locales y pastores en Marruecos, en las que, por cierto, Dios está haciendo cosas preciosas a pesar de la persecución al evangelio, y hemos descubierto diferentes necesidades que podemos suplir a corto plazo, como puede ser el envío de material para seguir extendiendo la palabra de Dios en dárija (dialecto árabe de Marruecos) y muchas otras necesidades a largo plazo que van surgiendo conforme nos adentramos en esta tierra, como, por ejemplo, invertir en la formación de líderes patrocinando sus estudios en otros países de lengua árabes en los que hay más libertad religiosa.
Solo el Cielo sabe lo que se esconde al otro lado de este paso de fe pero, sin duda, Dios está haciendo algo nuevo y veremos ríos de vida fluir en lugares que han estado desolados y desérticos durante generaciones.
UNA CASA
LISTA
PARA SERVIR
A NUESTRA
COMUNIDAD.
A través de esa ofrenda, podremos participar en todo lo que Díos está haciendo. Es nuestra oportunidad de mostrar nuestra gratitud a través de la generosidad.